Estaba dando un paseo cerca del Hotel. La fuente de enfrente estaba en mantenimiento, la estaban limpiando. Tan solo había verdín, nadie había dejado unas monedas. En el hotel, había muchísimas habitaciones en las que no había más que recuerdos. Entré en una de ellas.
¿Quién es esta persona? Me suena la cara...
Borré los recuerdos de las personas más insignificantes. Cerré los ojos ante el dolor que suponía el olvido.
Pero hay muchos hoteles, donde yo he estado sólo para nada, donde yo sólo he sido "alguien más". Yo también soy borrada de la mente de muchas personas. ¿Cuánta gente me habrá visto esta semana? Pocas personas se paran a pensar en lo bella que es una vida humana, comprendiéndola como la capacidad de voluntad. Estamos obligados a muchas cosas, porque si no actuamos de un modo y no respondemos siendo hipócritas, tenemos un problema. ¿Dónde está el sitio minúsculo reservado para la gente sincera, inútil y extraña? ¿Dónde está mi sitio? No encuentro a nadie que sea capaz de ver mi sinceridad de cristal, siempre piensan que tramo algo, siempre le dan la vuelta a mis intenciones. Y tengo que aguantarme, porque estoy loca.
Al menos sé que moriré algún día, y serviré de alimento para las plantas.